Cuando uno tiene la oportunidad de hacer un curso con alguien como Josep Pascual, no puede dejarla pasar y tiene que ir donde está este maestro del pan. Esta vez, fue en La Patente.
La teoría no faltó, explicando los diferentes ingredientes del pan, las funciones que tienen estos en el producto, así como las variaciones que podemos realizar dependiendo de los añadidos que tenga el pan: por ejemplo, la harina variará si la masa no lleva azúcar, lleva un poco o lleva mucho.
Y la práctica ha estado bien presente.
Primero, el maestro mostrando cómo se tienen que hacer las cosas...
Y después, haciéndolas nosostros.
El resultado final, anima mucho.
También hemos hecho otros panes.
Pero la estrella ha sido la pelota de pan.
Los alumnos la hemos hecho bajo su supervisión...
Y el resultado, nos ha dejado sin palabras.
Y, si ningún tipo de dusa, quiero acabar con, para mí, una frase que ha valido todo el curso y que recoge la sabiduría del maestro: "El pan tiene que ser bueno, bonito, pero, sobretodo, nutricionalmente extraordinario para el organismo".
La teoría no faltó, explicando los diferentes ingredientes del pan, las funciones que tienen estos en el producto, así como las variaciones que podemos realizar dependiendo de los añadidos que tenga el pan: por ejemplo, la harina variará si la masa no lleva azúcar, lleva un poco o lleva mucho.
Y la práctica ha estado bien presente.
Primero, el maestro mostrando cómo se tienen que hacer las cosas...
Y después, haciéndolas nosostros.
El resultado final, anima mucho.
También hemos hecho otros panes.
Pero la estrella ha sido la pelota de pan.
Los alumnos la hemos hecho bajo su supervisión...
Y el resultado, nos ha dejado sin palabras.
Y, si ningún tipo de dusa, quiero acabar con, para mí, una frase que ha valido todo el curso y que recoge la sabiduría del maestro: "El pan tiene que ser bueno, bonito, pero, sobretodo, nutricionalmente extraordinario para el organismo".
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